Anillos en perforaciones: ¿Realmente una elección adecuada?
Hay varias razones por las que los profesionales del piercing prefieren evitar el uso de anillos en los piercings iniciales.
Durante el período de curación, los anillos tienden a permanecer constantemente húmedos debido a la secreción, lo que crea un ambiente propicio para la proliferación de bacterias y polvo presentes en el aire, especialmente cuando estamos al aire libre. Y como siempre están girando, la suciedad y las bacterias pueden entrar en la zona perforada.
Algunas otras razones incluyen:
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Movimiento restringido: Los anillos tienden a moverse más que las barras (labret o barra) cuando el piercing se está curando. Esto puede aumentar el riesgo de irritación y prolongar el proceso de curación.
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Fricción: Los anillos pueden causar más fricción durante la cicatrización, ya que hay una mayor área de contacto con la piel. Esta fricción puede provocar complicaciones como inflamación o formación de queloides.
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Desalineación durante la curación: la forma en que se mueven los anillos puede provocar una desalineación del piercing durante el proceso de curación, lo que puede provocar problemas estéticos o molestias.
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Curación lenta: debido al mayor movimiento y la mayor fricción, las perforaciones con anillos generalmente tardan más en sanar en comparación con las perforaciones con barra.
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Riesgo de torsión: En algunas zonas del cuerpo, como la nariz, los anillos pueden torcerse durante la curación, provocando molestias y retrasando el proceso de curación.
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Limpieza más fácil: Las barras generalmente son más fáciles de limpiar durante el proceso de curación, ya que tienen una superficie más simple y es menos probable que retengan suciedad.
Además, es importante mencionar que algunos piercings específicos, como el septum (cartílago que separa las fosas nasales) y el daith (parte interna de la oreja) o el smiley (membrana dentro de la boca detrás del labio superior), suelen realizarse con Suena desde el principio. Esto se debe a la anatomía de estas áreas y a la forma en que los anillos encajan y se mueven en estas regiones específicas.
Por tanto, es una razón más por la que algunos profesionales prefieren optar por barras rectas, que pueden ofrecer una curación más controlada y son menos susceptibles a factores externos. Como siempre, es fundamental seguir nuestras pautas sobre el tipo de joyería más adecuada para el piercing concreto, teniendo en cuenta factores como la anatomía, las preferencias personales y los cuidados de cicatrización.
Texto : Igor Andrade - @piercer.igor
Oído : Andréia Rodrigues